Los Corazones
Esperanza Sánchez Gracia
Los corazones caminan en la noche
Se detienen a mirar las estrellas
Giran y danzan, buscan refugio en su canto
Llevan el color de los años en un poema.
Quieren comprar quimeras y gastar todos sus deseos
Regalan horizontes y suspiros.
La lluvia sideral les empapa los ojos
Pero tienen sed de recuerdos, de olvido de mares.
Los corazones cultivan los placeres de la luna
Se conmueven ante la libertad prohibida
Se abandonan al movimiento de la piedra
Y entonan una balada en la penumbra.
Los corazones se exilian en el amor
Rompen el silencio que purifica el alma
Duermen bajo el sol profetizando la luz
En un instante todas sus palomas se consuman.
Los corazones estallan en el mundo
Se abandonan, se olvidan en los otros corazones
Su sangre fluye como una cascada invencible
Se tatúan sonrisas de agua, de soles y de lunas
Se van devorando las esperanzas oscuras
Mientras se elevan como flechas de fuego.
Palpitan los astros en sus pechos
Y se ríen embriagados de sus sueños
La muerte no los sorprende, es su cómplice
Y permanecen altivos, llenos de vida
Enamorando a la eternidad.
Los corazones crecen como océanos
Van saludando a la tierra verde
Hablan con frases que perfuman los campos
Y maldicen con himnos al tiempo.
Los corazones son buenos amigos
Todo lo escuchan y todo lo callan
Se dilatan en los bosques y en el beso infinito.
Y frente al mar sacrifican todos sus versos.
Cuando un astro se apaga
A los corazones solo les basta su fuego
Para incendiar las consumaciones de la noche
Han vencidos los cielos ya no buscan,
La soledad ya no les preocupa.
Se entregan cantando con un olor a primavera.
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